Pensaba, sinceramente, que no volvería a retomar este blog, pero creo que el asunto lo merece, no digo más:
INDIGNACIÓN es lo que una siente cuando se lee la lista completa de Bibliotecas en español que el Instituto Cervantes ha creado por todo el mundo. Sí señores, desde Ammán hasta Viena, 61 bibliotecas. Aproximadamente, la mitad de estas bibliotecas tienen el nombre de un escritor español o latinoamericano. De todos esos nombres, SOLO UNO ES DE MUJER (María Zambrano).
Luego mucho día de la mujer y mucho rollo igualitario, pero a la hora de la verdad, ¿dónde están autoras como Sor Juana Inés de la Cruz, que le puso los pelos de punta a medio México hasta el extremo de meterse a monja para que la dejaran escribir en paz, dónde está Gabriela Mistral, que fue la primera persona en ganar un Nobel en Latinoamérica y la primera mujer en ganar el Nobel del continente, dónde está Gertrudis Gómez de Avellaneda, a la que le tenían tanto pánico los escritores contemporáneos que se tuvo que quedar en Asturias y no irse a Madrid, dónde está Emilia Pardo Bazán que es, probablemente, el "único escritor naturalista" de las letras españolas? Teresa de Ávila, Juana de Ibarbourou, Carolina Coronado, Mª Victoria Atencia, Idea Vilariño, Ángeles Mastretta... Y estas son solo las que me han venido a la cabeza de pura indignación...
Hay muchas bibliotecas sin nombre, pero solo una con nombre de mujer. Desde aquí, mi más sincera enhorabuena al Instituto Cervantes.
